Sigue la guerra de bandas en nuestra parroquia

Guerra entre bandas tiene en ascuas a vecinos de Core 8
miércoles, 08 de septiembre de 2010
Luz M. Carpio
Foto Carlos León

http://www.correodelcaroni.com/content/view/161297/130/

A Pedro Guevara lo ultimaron frente a su residencia
El ajuste de cuentas, resistencia al robo, guerra entre bandas y “tomar la justicia en sus propias manos”, son algunos de los móviles atribuidos a las seis muertes violentas ocurridas en el Core 8, a una semana de iniciado septiembre.
La ola de crímenes empezó el pasado viernes y, desde entonces, pareciera que un muerto por día es el saldo de la actividad delictiva en la barriada.

De esas cifras forma parte Pedro Juvenal Guevara Rodríguez, un joven de 19 años, que cayó abatido ayer frente a su residencia, ubicada en la manzana 77 del referido sector.

Según contaron testigos de lo ocurrido, desde un vehículo (cuyas características se desconocen), varios sujetos se le acercaron y sin mediar palabras, le efectuaron tres disparos mortales.

Uno de los balazos le perforó un brazo, otro el tórax y el último su abdomen.

Los pistoleros, como es costumbre, abandonaron la escena del crimen luego de cumplir con su objetivo. La familia de Guevara lo trasladó por medios particulares hasta la emergencia del ambulatorio Gran Sabana, sitio al cual llegó con signos vitales, pero falleció segundos después de su ingreso.

Guerra en el barrio
Además de sus familiares, fueron varios los vecinos que llegaron hasta el centro asistencial, tras enterarse del deceso.

Aunque fue grande el hermetismo reinante, fuentes policiales revelaron que “el ajuste de cuentas no es descartado y más teniendo en consideración las muertes ocurridas durante el fin de semana”.

La declaración hace referencia a que todos los ajusticiamientos registrados han tenido lugar en las manzanas colindantes del sector, que van desde la 76 hasta la 87, calles en las cuales residían los seis fallecidos contabilizados hasta el cierre de esta edición.

Los rumores entre vecinos permiten que las pesquisas realizadas por los uniformados tomen su rumbo, encaminándose hacia el esclarecimiento de los homicidios.

“Se escucha que existe una guerra entre bandas, iniciada por la muerte de un inocente. Supuestamente quieren cobrar uno de los asesinatos del fin de semana, es por ello que varios están cayendo, incluyendo gente que no es mala y no está vinculada a las ejecuciones”, confesó un testigo resguardado en el anonimato, aludiendo que podría ser el caso de Guevara.

Miedo en la calle
Pese a los fuertes operativos de seguridad, pareciera que los delincuentes hallan el momento indicado para salir a actuar, llevándose con ellos la vida de culpables e inocentes y sumando muertes a una lista que difícilmente encuentra fin.

Este flagelo ciertamente es enfrentado por las autoridades, pero hace falta apoyo, y más allá de la represión o actuación policial, la cultura, educación y formación adecuada en el hogar, es de vital importancia.

Con la muerte de Guevara crece la preocupación entre los residentes del sector, quienes viven a la expectativa y con temor de salir a las calles, por pensar que en cualquier momento podrían ser alcanzados por una bala que busca segar cualquier vida.

El cese de violencia y muertes es lo que piden, sólo que para lograrlo “hace falta el trabajo conjunto GNB-policía-comunidad, en cuanto a que estos refuercen su patrullaje, arresto y represión, si es necesaria, y los vecinos se comprometan a denunciar y no esconder a los culpables, pues el miedo a hablar es lo que hace que los delincuentes sigan en las calles, matando como si nada”.

Otro caído en el Core 8

En el Core 8 la lista roja de la primera semana de septiembre está integrada por César Lugo de 27 años de edad, Walter López de 55 años, Pedro Guevara de 37 años, Franklin González 28 años, Pedro Guevara de 19 años y Luis Caramo de 21 años de edad.

Este último era albañil y residía en la manzana 87. Presuntamente fue baleado cerca de su residencia el lunes a las 2:00 de la tarde. Trascendió que lo trasladaron hasta el CDI del Core 8 y posteriormente lo remitieron al Hospital Uyapar donde falleció por la gravedad de sus heridas.